La gobernadora de Maine, Janet Mills, se enfrentó verbalmente al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, durante una reunión con gobernadores en la Casa Blanca, luego de que el mandatario criticara públicamente al estado por no acatar una reciente orden ejecutiva que prohíbe la participación de mujeres y niñas transgénero en deportes escolares femeninos.
Durante el encuentro, Trump elogió la rápida implementación de la medida por parte de otras instituciones, como la Asociación Nacional de Atletas Colegiados, y cuestionó directamente a Mills por la postura de su estado. “¿Está aquí la gobernadora de Maine?”, preguntó el presidente antes de iniciar el intercambio. Tras confirmar su presencia, Mills declaró: “Estoy cumpliendo con las leyes estatales y federales”.
El presidente insistió en que la normativa federal debe ser acatada y advirtió que el incumplimiento podría tener consecuencias, como la suspensión del financiamiento federal al estado. “Será mejor que cumpla; de lo contrario, no va a obtener ningún tipo de financiamiento federal”, afirmó Trump, quien agregó que, a su juicio, la población de Maine “no quiere que los hombres participen en deportes femeninos”.
La gobernadora respondió reiterando que su gobierno está cumpliendo con la legislación vigente y concluyó la discusión con la frase: “Nos vemos en los tribunales”, ante lo cual el presidente replicó que le gustaría que el caso llegara a la justicia, calificándolo como “muy fácil” de resolver.
Este enfrentamiento ocurre mientras un juez federal ha bloqueado parcialmente otras órdenes ejecutivas firmadas por Trump que apuntaban a eliminar políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) en instituciones educativas. El magistrado argumentó que dichas disposiciones fomentaban una forma clara de discriminación, en una decisión que responde a una demanda interpuesta por la Asociación Estadounidense de Profesores Universitarios y la Asociación Nacional de Oficiales de Diversidad en la Educación Superior.