El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha celebrado la dimisión de la ministra de Finanzas y vice primera ministra de Canadá, Chrystia Freeland, calificando su comportamiento como “completamente tóxico”. Según reporta Europa Press, Trump ha utilizado sus redes sociales para criticar a Freeland y sus políticas, asegurando que su salida no será extrañada.
El líder estadounidense también hizo referencia a la salida de Freeland como una «dimisión» o «cese», insinuando que su renuncia se produjo en el contexto de discrepancias con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, a quien Trump volvió a referirse despectivamente como «gobernador».
Chrystia Freeland, en su declaración de renuncia, reconoció las diferencias políticas con Trudeau, especialmente en torno a la manera de abordar la reciente victoria de Trump en las elecciones presidenciales de noviembre y los desafíos que ello supone para Canadá. Freeland admitió que había perdido la «plena confianza» del primer ministro, lo que contribuyó a su decisión de apartarse del cargo.
La salida de Freeland llega en un momento de tensiones renovadas entre Estados Unidos y Canadá, pues Trump ha anunciado su intención de imponer nuevos aranceles a Canadá y México tras su toma de posesión el próximo 20 de enero. Estas medidas, de concretarse, podrían tensar las relaciones comerciales en el marco del tratado T-MEC, que regula los intercambios económicos entre los tres países norteamericanos.
La dimisión de Freeland ha generado reacciones tanto en Canadá como en el ámbito internacional, destacando las posibles repercusiones que esta salida tendrá en la política económica del país y en la relación bilateral con Estados Unidos en los próximos meses.