North Codorus, Pensilvania. Un operativo de la policía en el condado de York terminó en tragedia el miércoles, cuando tres agentes fallecieron y otros dos resultaron heridos en un tiroteo mientras cumplían una orden judicial en una vivienda vinculada a un caso de violencia doméstica.
De acuerdo con reportes de AP y NBC Philadelphia, los hechos ocurrieron cuando un equipo de oficiales se presentó en el lugar para ejecutar un cateo relacionado con un incidente reportado el día anterior. El sospechoso abrió fuego de manera inmediata contra los agentes, provocando la muerte de tres de ellos en el sitio. El individuo fue finalmente abatido por la policía.
Los dos uniformados heridos fueron trasladados a un hospital cercano, donde permanecen en estado crítico, aunque los médicos confirmaron que se encuentran estables.
El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, lamentó lo ocurrido y lo describió como “una jornada absolutamente devastadora”, expresando solidaridad con las familias de las víctimas y destacando la valentía de los agentes.
Vecinos de la zona señalaron haber escuchado ráfagas de disparos y la policía acordonó la zona hasta asegurar la escena. La investigación está en curso con la participación de autoridades locales y federales, quienes buscan precisar los motivos detrás del ataque.
Este tiroteo se ha convertido en uno de los episodios más graves contra fuerzas policiales en Pensilvania en los últimos años, generando una profunda conmoción dentro y fuera del estado.
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