Washington, EE.UU. – La Marina de los Estados Unidos ha movilizado dos destructores de misiles guiados clase Arleigh Burke, un guardacostas y un avión antisubmarino en respuesta a la inminente llegada de una flotilla naval rusa a Cuba. Esta información ha sido confirmada por datos de rastreo marítimo y aéreo de fuente abierta, reportados por la revista Newsweek.
Los destructores USS Truxtun y USS Donald Cook, junto con el guardacostas CG Stone de la Guardia Costera de EE.UU. y la fragata HMCS Ville de Quebec de la Marina Real Canadiense, estarían navegando hacia el sur por la costa de Florida, aparentemente siguiendo al destacamento naval ruso que se espera llegue a Cuba el 12 de junio.
Según declaraciones del Gobierno cubano, la visita incluye también un remolcador de salvamento, el Nikolai Chiker, destacando la colaboración técnica cubana en la recepción de estos navíos. El Ministerio de las Fuerzas Armadas de Cuba (Minfar) ha descrito el evento como una práctica histórica, subrayando que la escala no representa una amenaza para la región y que los navíos no portan armas nucleares.
A pesar de la movilización de varios buques de guerra estadounidenses que siguieron la trayectoria de la flotilla cerca de la costa de Florida, el Departamento de Defensa de EE. UU. ha manifestado que no percibe esta actividad como una amenaza directa, considerándola parte de una rutina naval.
Este evento ocurre en un momento de tensión aumentada, justo después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, anunciase medidas en respuesta a las acciones de países occidentales en el conflicto con Ucrania. La fragata Gorshkov y el submarino Kazan son piezas clave en las maniobras militares rusas, incluyendo ejercicios recientes de lanzamiento virtual de misiles de alta precisión en aguas internacionales del Atlántico.
Además del movimiento de los destructores y el guardacostas, el reporte de Newsweek indica que al menos un avión antisubmarino P-8A Poseidón de la Marina de los EE.UU. y un CP-140 Aurora canadiense han estado realizando tareas de vigilancia sobre el área.
La flotilla rusa que llegará a Cuba incluye la fragata Almirante Gorshkov, la más moderna de su tipo en la Marina Rusa, el submarino de propulsión nuclear Kazán, el petrolero de flota Pashin y el remolcador de rescate Nikolay Chiker. Las Fuerzas Armadas cubanas confirmaron la visita y aclararon que ninguno de los navíos rusos porta armas nucleares, argumentando que su presencia no representa una amenaza para la región.
