El Gobierno ha anunciado que el presidente Pedro Sánchez no acudirá a la comisión de investigación organizada por la Asamblea de Madrid, cuyo objetivo es investigar si hubo un trato de favor entre la Universidad Complutense, la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso y la esposa del presidente, Begoña Gómez. La inclusión de Sánchez en la lista de comparecientes fue promovida por el Partido Popular de Díaz Ayuso, pero fuentes del Ejecutivo han dejado claro que el presidente no tiene la obligación legal de presentarse ante dicha comisión.
Fuentes consultadas en Moncloa han explicado que los miembros del Gobierno no están obligados a comparecer en las comisiones de investigación de los parlamentos autonómicos, apoyándose en diversos dictámenes del Consejo de Estado que refuerzan esta postura. Entre los informes citados se encuentra uno del 25 de abril de 2019, emitido en relación con una convocatoria de miembros del Gobierno ante el Parlament de Cataluña. Dicho dictamen concluye de manera clara que tanto los miembros actuales como anteriores del Gobierno y otras autoridades del Estado no tienen la obligación de atender este tipo de solicitudes por parte de comisiones autonómicas.
Además, Moncloa ha recordado que el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no asistió a una convocatoria similar realizada por el Parlament catalán, lo que sienta un precedente en cuanto a la inasistencia de altos cargos del Ejecutivo a este tipo de comisiones en parlamentos regionales.
Desde el Ejecutivo central también han subrayado que esta iniciativa del Partido Popular madrileño está «destinada al fracaso», sugiriendo que tiene un propósito político más que investigativo. Según las mismas fuentes, la intención de Díaz Ayuso al incluir a Sánchez en la lista de comparecientes no es otra que «intentar dejar en evidencia» a Alberto Núñez Feijóo, líder del PP a nivel nacional, mostrándolo como un líder de la oposición «ineficaz» frente al Gobierno.
Este movimiento del PP madrileño se produce en un contexto político tenso, donde las estrategias para presionar tanto al Gobierno central como a la oposición se entrelazan en un clima de constante confrontación entre las diferentes esferas políticas. La presencia de Begoña Gómez, esposa de Sánchez, en esta investigación ha añadido un matiz personal a la controversia, pero la postura del Gobierno es clara en su negativa a participar en una comisión que consideran sin fundamentos legales para obligar la comparecencia del presidente.
La comisión en la Asamblea de Madrid busca investigar presuntas irregularidades relacionadas con el trato de favor hacia Isabel Díaz Ayuso y Begoña Gómez en sus vínculos con la Universidad Complutense. Sin embargo, la negativa del Gobierno central a involucrarse podría generar un nuevo frente de debate entre el Ejecutivo de Sánchez y la administración regional de Díaz Ayuso, que sigue siendo una de las figuras más relevantes dentro del Partido Popular.
