El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha oficializado una ley que marca un punto de inflexión en la gestión de las situaciones de personas sin hogar en el estado. Acompañado por figuras locales significativas como el alcalde Steven Meiner y el presidente de la Cámara de Representantes de Florida, Paul Renner, la firma del proyecto de ley tuvo lugar en un connotado restaurante del área.
La ley, conocida como HB 1365, establece una prohibición clara contra la práctica de dormir o acampar en propiedades públicas, incluyendo edificios y áreas de tránsito, por parte de personas sin hogar. Esta medida apunta a las jurisdicciones de condados y municipios, restringiendo la autorización de estas actividades en sus dominios. Sin embargo, se especifica que dichas prohibiciones no aplicarán bajo circunstancias de estados de emergencia declarados por el gobernador o funcionarios locales.
DeSantis enfatizó la intención detrás de la ley, asegurando que busca garantizar la seguridad en las calles de Florida para todos sus residentes. Además, destacó el contraste en el crecimiento de la población sin hogar a nivel nacional, en comparación con una notable disminución en Florida, donde se ha observado una reducción del 11% entre 2019 y 2022.
Además de las restricciones, la legislación prevé un aumento en el financiamiento para albergues y programas dirigidos a la adicción y enfermedades mentales. Ante la pregunta de qué sucederá con aquellas personas que rechacen asistencia y prefieran permanecer en las calles, el gobernador DeSantis afirmó que las autoridades locales tendrán el derecho de proceder al arresto.
No obstante, la ley también ofrece la posibilidad a condados y municipios de designar áreas públicas específicas para dormir o acampar, siempre y cuando se obtenga una mayoría de votos y la aprobación del Departamento de Niños y Familias. Estas áreas designadas deberán cumplir con ciertos requisitos y no podrán utilizarse de manera continua por más de un año.
La implementación de esta medida está prevista para el 1 de octubre de este año, marcando un nuevo capítulo en la gestión de la problemática de las personas sin hogar en Florida. La medida ha generado diversas reacciones, reflejando el complejo balance entre la regulación del espacio público y la necesidad de ofrecer soluciones compasivas y efectivas a las personas en situación de calle.
