Falla de Seguridad en Mitin de Trump Provoca Intensa Audiencia en el Congreso

El 13 de julio, durante un mitin en Butler, Pensilvania, se produjo un intento de asesinato contra el expresidente Donald Trump, que resultó en una audiencia tensa con la directora del Servicio Secreto, Kimberly Cheatle, quien enfrentó un interrogatorio riguroso por parte de legisladores de ambos partidos.

La directora del Servicio Secreto explicó ante la Comisión de Supervisión de la Cámara de Representantes que, aunque el expresidente resultó herido levemente en la oreja, el incidente significó el «fracaso operativo más significativo» en la historia reciente de la agencia. Cheatle, quien ha servido en el Servicio Secreto por casi tres décadas, afirmó su compromiso de asumir responsabilidad completa y mejorar los protocolos de seguridad.

El representante James Comer, presidente de la Comisión, destacó la gravedad del incidente, refiriéndose a él como «uno de los días más oscuros en la historia política de Estados Unidos». Durante la audiencia, se reveló que antes de que Trump subiera al escenario, el Servicio Secreto había recibido múltiples advertencias de una presencia sospechosa en la zona, lo cual, según Cheatle, no fue comunicado efectivamente.

Thomas Matthew Crooks, el individuo identificado como el atacante, comenzó a disparar segundos después de haber sido reconocido como una amenaza, a pesar de la presencia de personal de seguridad. El equipo táctico del Servicio Secreto y un equipo de contrafrancotiradores actuaron con rapidez para neutralizar al atacante y asegurar la evacuación de Trump.

La directora Cheatle confirmó que no había agentes en el edificio desde donde Crooks disparó, lo que provocó cuestionamientos adicionales sobre las decisiones tomadas durante el avance del mitin. También se abordó la cuestión de la comunicación interna y las decisiones tomadas en momentos críticos.

Al concluir la audiencia, Cheatle reafirmó su determinación de revisar y fortalecer los procedimientos del Servicio Secreto para garantizar que un incidente similar no se repita en el futuro. La investigación interna del Servicio Secreto, según indicó, se espera que dure 60 días, mientras que investigaciones adicionales del FBI y el inspector general del Departamento de Seguridad Nacional están en curso.

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