En un giro que desafía las expectativas iniciales, Donald Trump parece haberse asegurado la victoria en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, con una ventaja clara en el mapa electoral. Según los últimos datos proporcionados por The Associated Press (AP), Trump acumula 267 votos electorales frente a los 214 de su contrincante Kamala Harris, lo que lo coloca a un paso de los 270 necesarios para proclamarse vencedor.
A pesar de que numerosas encuestas, incluidas las proyecciones de nuestro medio, CubaHerald, indicaban una posible ventaja para Harris, el voto masivo en las zonas rurales ha sido decisivo en esta contienda. El electorado rural, con una alta participación, ha inclinado la balanza en favor del candidato republicano, especialmente en estados clave que, según se anticipaba, podrían inclinarse hacia el lado demócrata.
El mapa electoral muestra una fuerte división regional, con los estados rurales y del sur en mayoría apoyando a Trump, mientras que los estados del oeste y noreste han respaldado a Harris. Hasta el momento, Trump lidera con un 51.2% del voto popular (68,436,039 votos), en contraste con el 47.4% (63,364,441 votos) que ha obtenido Harris. Esta diferencia en la votación popular refleja también la profunda polarización en el electorado estadounidense.
Con estos resultados preliminares, solo falta la confirmación oficial de los estados en disputa para que el triunfo de Trump sea definitivo. La masiva movilización de los votantes en áreas rurales ha sido fundamental, demostrando una vez más el peso electoral de estas zonas y cambiando drásticamente el pronóstico de la contienda.