Autoridades de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) detuvieron este martes a Jorge Luis Vega García, exteniente coronel del Ministerio del Interior de Cuba, acusado por varios exreclusos de participar en violaciones de derechos humanos durante su paso por centros penitenciarios en la Isla.
Vega García ingresó legalmente a territorio estadounidense el 20 de enero de 2024 a través del programa de parole humanitario. Su arresto se produce tras meses de denuncias públicas y una petición formal presentada en marzo por el congresista Carlos Giménez, quien solicitó investigar a un centenar de ciudadanos cubanos señalados por presuntos abusos.
Según testimonios recogidos por Martí Noticias, el exoficial ejerció funciones de alto rango en las prisiones de Agüica y Canaleta, en Matanzas, donde ex presos políticos lo vinculan con golpizas, confinamientos prolongados y amenazas contra personas detenidas por motivos políticos, incluyendo a prisioneros de la Primavera Negra de 2003.
Las revelaciones de estos testigos habrían sido determinantes para su detención, aunque aún no se ha confirmado si enfrentará cargos en tribunales estadounidenses o si será deportado.
Vega García había iniciado el trámite para acogerse a la Ley de Ajuste Cubano, que permite regularizar la situación migratoria tras un año de residencia en el país. Sin embargo, este proceso podría quedar anulado si se comprueba que ocultó o falseó información en su solicitud.
El caso ha reavivado el debate sobre las deficiencias en los mecanismos de verificación de antecedentes del parole humanitario, cuestionados por organizaciones del exilio que reclaman filtros más rigurosos para impedir la entrada de personas implicadas en violaciones de derechos humanos.
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