La crisis energética en Cuba continúa profundizándose, y para este jueves, la Empresa Eléctrica ha anunciado que algunas áreas de la provincia de Camagüey solo contarán con tres horas de electricidad durante todo el día. La situación no se limita a esta región, ya que otras localidades del país también enfrentan restricciones severas en el suministro eléctrico.
Desde la tarde del miércoles, la intensidad de los apagones ha aumentado, dejando a miles de familias en la isla con apenas unas pocas horas de luz diaria. En Camagüey, la noticia de la drástica reducción de electricidad ha generado un profundo malestar entre los residentes, quienes ven afectadas sus actividades diarias y su calidad de vida.
Las redes sociales se han convertido en el principal canal para expresar la frustración. “¿Cómo es posible que solo nos den tres horas de luz al día? ¿Esperan que sobrevivamos con eso?”, escribió un residente de Camagüey en Facebook. La falta de claridad sobre las soluciones que propone el gobierno ha sido otro de los puntos de crítica. “Llevamos meses con esta situación, y todo lo que nos dicen es que tengamos paciencia. Mientras tanto, seguimos a oscuras”, señaló otro usuario.
El malestar se ha intensificado por las recientes declaraciones del presidente Miguel Díaz-Canel en la ONU, donde afirmó que Cuba está avanzando en el sector energético, algo que muchos cubanos consideran un despropósito en medio de los apagones. “Decir eso mientras aquí en Camagüey solo tenemos tres horas de corriente es una falta de respeto”, comentó un camagüeyano, poniendo de manifiesto la percepción de desconexión entre el discurso oficial y la situación que se vive en las calles.
Además de Camagüey, otras provincias también enfrentan cortes de luz prolongados. En algunos lugares, los apagones se extienden por más de 12 horas, lo que ha llevado a la población a buscar alternativas para sobrellevar la falta de electricidad, como el uso de plantas eléctricas y lámparas recargables. Sin embargo, estas soluciones son insuficientes ante la magnitud del problema.
Según el último informe de la Unión Eléctrica (UNE), la disponibilidad de generación sigue siendo baja, lo que impide satisfacer la demanda nacional y obliga a programar cortes de luz en gran parte del país. Las limitaciones en la generación se deben a la salida de servicio de varias centrales termoeléctricas, sumadas a la escasez de combustible.
Sin una solución a la vista, los cubanos temen que la situación empeore aún más. “Nos piden que seamos fuertes, pero nadie puede vivir con tres horas de electricidad al día. Esto no es vida”, lamentó un residente de otra localidad afectada por los apagones. Mientras tanto, el descontento crece y la incertidumbre se adueña de la vida diaria en la isla.
La crisis energética en Cuba ha expuesto las serias limitaciones del sistema eléctrico nacional, y la población continúa esperando respuestas concretas. Con los apagones prolongados y la falta de perspectivas claras de mejora, el anuncio de solo tres horas de electricidad en algunas áreas de Camagüey y otras localidades es un recordatorio de los desafíos que enfrentan los cubanos en su día a día.