En un reciente pronunciamiento, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha manifestado su discrepancia con las acciones llevadas a cabo por el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, en el contexto del conflicto en la Franja de Gaza. Biden ha calificado estas acciones como un «error», enfatizando la importancia de permitir la entrada de ayuda humanitaria en el territorio. Según reporta Europa Press, el mandatario estadounidense ha sido enfático al declarar que «no hay excusas» que justifiquen el impedimento de suministro de asistencia vital a la zona afectada, instando a un inmediato alto el fuego.
Durante una entrevista con el canal de televisión estadounidense Univision, Biden ha expresado su preocupación por la grave situación humanitaria que enfrenta la población de Gaza, exacerbada por la destrucción de infraestructura civil y la escasez de alimentos y suministros básicos. «Es intolerable», afirmó, haciendo referencia a las acciones del gobierno de Netanyahu.
El presidente Biden ha aprovechado la ocasión para reiterar su llamado a un cese de las hostilidades que facilite el acceso a ayuda humanitaria. «Lo que pido a los israelíes es un alto el fuego y permitan, durante las próximas seis u ocho semanas, el acceso total de todos los alimentos y medicinas que entren en el país», declaró, señalando que ha mantenido conversaciones con líderes regionales —incluidos los de Arabia Saudita, Jordania y Egipto— quienes se han mostrado dispuestos a contribuir con el traslado de los suministros necesarios.
Adicionalmente, Biden ha condenado el reciente ataque contra un equipo de la ONG World Central Kitchen (WCK) en Gaza, que resultó en la muerte de siete trabajadores, ilustrando aún más la crítica situación en el terreno.
El conflicto en la Franja de Gaza se intensificó tras los ataques de Hamás el 7 de octubre, que dejaron un saldo de 1.200 muertos y 240 rehenes, de los cuales un centenar ha sido liberado. Las autoridades palestinas han reportado la muerte de más de 33.300 personas desde el inicio de la ofensiva israelí, a lo que se suman aproximadamente 450 palestinos fallecidos en Cisjordania y Jerusalén Este debido a enfrentamientos con fuerzas de seguridad y colonos israelíes. El llamado de Biden a un alto el fuego busca abrir una ventana a la asistencia humanitaria y aliviar el profundo sufrimiento de los afectados en la región.
