La plataforma de videos YouTube ha cerrado el canal del programa «Con el mazo dando», dirigido por el polémico político venezolano Diosdado Cabello, quien ha sido ampliamente criticado por su incitación a la represión de opositores y su apoyo a fraudes electorales en Venezuela. El cierre del canal se produjo poco después de que Cabello celebrara haber alcanzado los 100 mil seguidores, logro que presumió mostrando la placa conmemorativa otorgada por la plataforma. Sin embargo, informes señalaron que la mayoría de estos seguidores eran bots, lo que revela un intento descarado de manipular la opinión pública.
Diosdado Cabello, considerado el rostro más feroz del chavismo, ha utilizado «Con el mazo dando» como una herramienta para atacar y hostigar a opositores, periodistas y defensores de derechos humanos. A través de su programa, Cabello no ha dudado en incitar a la persecución y represión de quienes se oponen al régimen, creando un clima de miedo e intimidación en Venezuela. Su retórica ha sido un componente clave en el sostenimiento del régimen de Nicolás Maduro, especialmente durante las elecciones plagadas de irregularidades y acusaciones de fraude.
La decisión de YouTube de cerrar su canal representa un golpe a una de las principales plataformas de propaganda del régimen chavista. Además, pone en evidencia las prácticas cuestionables utilizadas por Cabello y su equipo para inflar artificialmente su popularidad en línea, engañando tanto a seguidores como a críticos.
El uso de bots y seguidores falsos para simular apoyo es una estrategia bien conocida en regímenes autoritarios que buscan legitimarse ante la comunidad internacional. En el caso de Cabello, este comportamiento es coherente con su trayectoria de manipulación y coerción, que se ha manifestado no solo en el ámbito digital, sino también en la represión física y violenta contra quienes se atreven a desafiar el poder del chavismo.
Aunque Cabello aún no ha emitido una declaración sobre el cierre de su canal, la reacción de sus seguidores y aliados no se ha hecho esperar, acusando a YouTube de censura. Sin embargo, esta medida debe interpretarse como un paso necesario para frenar la difusión de discursos de odio y de tácticas fraudulentas que buscan sostener un régimen que ha erosionado las instituciones democráticas en Venezuela.
La suspensión de «Con el mazo dando» en YouTube es un recordatorio del poder y la responsabilidad que tienen las plataformas digitales para impedir que se utilicen como herramientas de propaganda y represión. Sin embargo, queda por ver si otras plataformas seguirán el ejemplo de YouTube o si Cabello logrará trasladar su discurso de odio y manipulación a otros espacios en línea.
