María Victoria Gil, o como es conocida por todos, Vicky De la Gran Escena, celebró su cumpleaños número 68 en una publicación reciente en su cuenta de TikTok, acompañada de su hijo. Por motivo de esta celebración, CubaHerald tuvo el honor de realizar una entrevista muy cercana.
CubaHerald: ¿Qué les dirías a quienes intentan mezclar el arte con la política?
Vicky: El arte es el lenguaje universal. A través del arte el ser humano crece, se convierte en una persona más plena. La música, la danza, las artes plásticas, la literatura tienden puentes, trascienden fronteras. La política es un mal necesario. No se puede dirigir el mundo sin ideas políticas, pero son totalmente independientes. El arte nos engrandece, la política nos contiene. Lamentablemente, muchos se lucran vinculando ambas esferas, y eso me parece erróneo, descabellado y triste.
CubaHerald: Compartiste tu cumpleaños número 68 en TikTok, una plataforma popular entre los jóvenes. ¿Cómo te has adaptado al mundo de las redes sociales?
Vicky: Las redes sociales bien llevadas son un puente de amistad y de entendimiento. Me divierto muchísimo con esa plataforma. Sigo a verdaderos genios como lo son Coño Guru y Abejas Memes; también sigo en directo debates políticos con los diversos partidos de España. Es una red interactiva. Me gusta muchísimo.
CubaHerald: Vicky, has sido una figura muy querida en la televisión cubana, especialmente por tu papel en De la Gran Escena. ¿Qué recuerdos más especiales guardas de esos años frente a las cámaras y cómo crees que ese programa impactó en la cultura cubana?
Vicky: De la Gran Escena es lo más importante que me ha sucedido en mi vida profesional. Soy producto del Curso de Formación Completa para Locutores de Radio y Televisión del año 1981. Acababa de graduarme de licenciada en Derecho por la Universidad de La Habana y me presenté a las audiciones de selectividad para este curso. Fui aprobada y comencé las clases presenciales con grandes íconos de la locución en Cuba como Eva Rodríguez, Consuelo Vidal, Cepero Brito, Germán Pinelli, Argelia Pera, Marianita Morejón, entre otros grandes. Me inicié en ICR Estudio bajo la dirección de Lolina Cuadras y Oscar Gómez. Luego fui descubierta por Antonio Miguel para presentar el programa Ballet Visión. Al surgir la idea de De la Gran Escena, el director de la Redacción Musical de la Televisión Cubana, Jorge Luis Pacheco, el director José Ramón Artigas y el escritor Orlando Quiroga me escogieron para ser la presentadora junto a Omar Mohinelo. A partir de ese momento me dediqué en cuerpo y alma a ese espacio, en el que me mantuve 30 años consecutivos, hasta que vine a residir a España en el 2015. De la Gran Escena vino a cumplir un rol vital en el desarrollo cultural del público cubano. Llegaba a la pequeña pantalla semanalmente con lo mejor y más selecto del arte patrio e internacional. Para mí es un privilegio haber tenido la posibilidad de influir en el gusto musical y artístico en general.
CubaHerald: ¿En qué momento de tu vida fuiste consciente del inmenso amor y cariño que te tiene el pueblo cubano?
Vicky: Desde el nacimiento del programa De la Gran Escena, el público me demostró su cariño y su respeto. He sido siempre una persona muy sencilla. Me subía a la guagua y recibía innumerables muestras de amor. Pero el momento que ha quedado grabado en lo más profundo de mi corazón es el que voy a explicarte. En marzo de 2024 fui a Cuba como lo he hecho siempre cada dos años para no perder mis derechos ciudadanos. El 7 de marzo, el Noticiero Nacional de la Televisión Cubana, en su emisión estelar, dio a conocer la noticia de la investigación a mi hermano Alejandro Gil Fernández por graves errores relacionados con el desempeño de sus funciones. No puedo explicar la vergüenza que sentí. Al siguiente día tenía que salir a la calle obligatoriamente para cumplir compromisos ineludibles. Lo hice presa de un gran pavor. Cuál sería mi sorpresa cuando, frente al apartamento en el que me alojaba, un baño de pueblo me estaba esperando. “¡Viva Vicky! ¡Te apoyamos, te queremos!”, eran algunas de las frases que escuché entre la emoción y las lágrimas. Supe entonces que podía morir ese día. Que había sembrado un árbol, que había escrito un libro, que había dejado huellas en el alma de mi pueblo.
CubaHerald: Para finalizar, ¿te gustaría compartir algún mensaje especial o reflexión que consideres importante para tus seguidores y el público cubano?
Vicky: A mi pueblo le agradezco su amor incondicional e infinito. Siempre seré para ellos Vicky de La Gran Escena. Deseo que me recuerden por todos esos momentos que compartimos a través de la pequeña pantalla, en el teatro y en las calles de mi Habana. Les ruego que no me juzguen por la sangre que comparto con Alejandro Gil, ya bastante vergüenza siento por ello. Les reitero mi amor inconmensurable y siempre los llevaré en lo más sagrado de mi memoria y de mi vida.
