El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha salido en defensa del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, tras su reciente imputación por el Tribunal Supremo. Según reporta Europa Press, Sánchez respaldó el trabajo de García Ortiz y señaló directamente al novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, calificándolo como un «delincuente confeso». Asimismo, el jefe del Ejecutivo exigió la dimisión de la presidenta madrileña por su presunta implicación indirecta en el caso.
Durante una rueda de prensa posterior a la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea en Bruselas, Sánchez fue contundente en sus declaraciones, argumentando que el origen del conflicto radica en la difusión de un bulo por parte del jefe de gabinete de Ayuso, quien es pareja del mencionado «delincuente confeso». El presidente subrayó que el fiscal general «hizo su trabajo» al perseguir delitos, y pidió al líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, que asuma responsabilidades y exija la renuncia de Díaz Ayuso.
En su intervención, Sánchez fue crítico con la gestión del PP y sus aparentes dobles estándares, al tiempo que reiteró las acusaciones sobre las ganancias obtenidas por el novio de Ayuso en la venta de mascarillas durante la pandemia, insinuando que la presidenta autonómica podría haberse beneficiado indirectamente de esos acuerdos comerciales.
El caso Ábalos y las críticas del PP
Sánchez también se refirió a las críticas que el PP le ha lanzado en relación al exministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García, envueltos en una investigación judicial. El presidente aseguró que actuó con contundencia desde que surgieron los primeros indicios del caso, hace ocho meses, y se mostró molesto por las lecciones que, según él, intenta impartir el Partido Popular. Recordó, además, que fue el propio PP quien votó a favor de cerrar la comisión de investigación sobre este asunto en el Congreso.
Polémica sobre el viaje de Delcy Rodríguez
En otro tema polémico, Pedro Sánchez fue cuestionado sobre las diferentes versiones que se han ofrecido desde su Gobierno respecto a la visita de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, a España. Sánchez negó que existieran contradicciones y afirmó que tanto él como su equipo han mantenido una postura clara sobre el caso, reiterando que el viaje de Rodríguez no violó las sanciones individuales que le impedían estar en el espacio Schengen en el momento de la visita.
Estas declaraciones del presidente surgen tras la publicación de un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que indica que Sánchez fue informado de la visita por José Luis Ábalos días antes de que esta se llevara a cabo, y que el presidente dio su consentimiento para la reunión. A pesar de esta nueva información, Sánchez reiteró que no se produjo ninguna irregularidad en el manejo del encuentro con la alta funcionaria venezolana.
