Omara Portuondo, la icónica cantante cubana, ha anunciado su retiro definitivo de los escenarios tras un incidente ocurrido durante su última presentación en el Palau de la Música de Barcelona. La noticia fue confirmada este jueves por su hijo y mánager, Ariel Jiménez Portuondo, quien informó que la artista de 93 años se encuentra bajo el cuidado de su médico personal y en buen estado de salud, aunque su retiro es una decisión tomada en beneficio de su bienestar.
Omara, quien celebrará su 94 cumpleaños en octubre, ha sido una figura central en la música cubana por décadas y, a pesar de su avanzada edad, ha continuado ofreciendo presentaciones cuidadosamente seleccionadas. Según explicó su hijo, las actuaciones de Portuondo en los últimos años han sido reducidas en duración y frecuencia, siempre teniendo en cuenta sus condiciones físicas y de salud. «Privarla de la posibilidad de cantar sería condenarla a la tristeza», expresó Ariel Jiménez, destacando la importancia del canto en la vida de la artista.
En el incidente más reciente, durante el concierto en Barcelona el 2 de octubre, Portuondo mostró signos de fatiga tras interpretar el clásico «Quizás, quizás, quizás» de Osvaldo Farrés, lo que llevó a su equipo a retirarla del escenario por precaución. Aunque esto pudo generar preocupación entre los asistentes, Jiménez aclaró que situaciones similares pueden ocurrirle a cualquier artista sin importar la edad. La Orquesta Failde, que ha acompañado a Omara en esta última etapa de su carrera, continuó con el espectáculo, recibiendo elogios por su profesionalismo.
El anuncio del retiro se hará oficial el próximo domingo en Budapest, donde estaba prevista otra de las presentaciones programadas para este año. En esta ocasión, Omara no cantará, pero recibirá un homenaje por parte de la Orquesta Failde y del público asistente. A partir de entonces, aunque no volverá a los escenarios, Portuondo continuará grabando y ensayando desde su casa, siempre y cuando su salud lo permita. Su familia y seguidores más cercanos entienden que Omara cantará solo cuando lo desee y en la medida en que se sienta capaz, honrando una carrera legendaria que ha dejado una huella profunda en la música internacional.
Este retiro marca el final de una era para una de las voces más importantes de la música cubana y latinoamericana, cuya influencia y legado perdurarán a través de sus grabaciones y el amor incondicional de su público.