Un terremoto de magnitud 7.1 sacudió este lunes la región montañosa del Tíbet, afectando gravemente a la ciudad sagrada de Shigatse. Según las autoridades locales, más de 125 personas perdieron la vida como resultado del sismo, que dejó además un número considerable de heridos y daños significativos en infraestructura.
El fuerte movimiento telúrico también se sintió en Nepal y en algunas regiones de India, causando alarma entre las poblaciones cercanas. Equipos de rescate se han desplegado en las áreas más afectadas para buscar sobrevivientes entre los escombros y brindar asistencia a los heridos.
En Shigatse, una de las ciudades más importantes del Tíbet y conocida por su patrimonio cultural, las autoridades trabajan para evaluar el alcance de los daños. Edificios históricos y religiosos, así como viviendas, se encuentran entre las estructuras más afectadas.
Las autoridades chinas han activado planes de emergencia para atender a los damnificados, proporcionando refugio, alimentos y atención médica. Mientras tanto, los equipos de rescate y ayuda humanitaria continúan operando en condiciones desafiantes debido a la altitud y las bajas temperaturas de la región.
La comunidad internacional ha expresado su solidaridad con las víctimas de esta tragedia, mientras se espera que el número de afectados continúe aumentando a medida que se obtengan más reportes de las áreas remotas.