La escasez de gasolina en los servicentros de CUPET en La Habana ha paralizado la movilidad en la capital cubana. Tras cuatro días consecutivos sin suministro, las filas de taxis en espera de combustible se extienden por kilómetros, una escena que refleja la grave crisis energética que enfrenta el país.
El impacto de esta situación es evidente en las calles de la ciudad, donde el transporte público y privado está prácticamente detenido. «No hay quien se mueva hoy en La Habana», expresó un ciudadano mientras observaba la larga cola de vehículos que aguardaban pacientemente su turno para abastecerse.
Conductores de taxis y otros transportistas lamentan la incertidumbre y los contratiempos causados por la falta de gasolina, que no solo afecta sus ingresos diarios, sino también la vida cotidiana de miles de habaneros que dependen de estos servicios para sus traslados.
Hasta el momento, las autoridades no han emitido un comunicado oficial sobre las causas de esta prolongada interrupción en el suministro ni han ofrecido una fecha concreta para la normalización del servicio.
Mientras tanto, la población continúa enfrentando la complicada realidad de una capital paralizada, donde las largas esperas y la improvisación se han convertido en parte del día a día. Este panorama resalta, una vez más, la fragilidad del sistema energético en el país y la necesidad de encontrar soluciones sostenibles para evitar que estas situaciones se repitan.
Fuente: Con Imágenes de @LaTijera Facebook
