Momentos de tensión se vivieron a bordo de un Airbus A321 que cubría la ruta Hangzhou–Seúl, cuando un cargador portátil (power bank) se incendió repentinamente en mitad del vuelo, llenando de humo la cabina de pasajeros.
Según informaron medios asiáticos, el incidente obligó a la tripulación a activar los protocolos de emergencia y desviar el avión hacia Shanghái, donde logró aterrizar sin contratiempos. Durante el suceso, los asistentes de vuelo actuaron con rapidez utilizando extintores portátiles para sofocar el fuego antes de que se propagara.
Los pasajeros fueron trasladados a un área segura tras el aterrizaje, y las autoridades aeroportuarias confirmaron que no hubo heridos ni intoxicados por inhalación de humo. La aeronave fue inspeccionada por equipos técnicos y de bomberos antes de ser retirada temporalmente de servicio.
Aunque los incendios por dispositivos electrónicos en vuelo son poco comunes, la aviación civil ha advertido repetidamente sobre los riesgos que representan las baterías de litio, en especial cuando se transportan sin las debidas medidas de seguridad. Este tipo de baterías, al sobrecalentarse o dañarse, pueden provocar incendios espontáneos difíciles de contener en espacios reducidos como una cabina presurizada.
Las autoridades chinas y surcoreanas colaboran ahora en la investigación del incidente, con el objetivo de determinar el tipo de cargador implicado, su marca y si cumplía con las regulaciones internacionales de transporte aéreo.
El vuelo, que pertenecía a una aerolínea asiática no identificada oficialmente, reanudará operaciones una vez concluidas las inspecciones y verificaciones de seguridad.
#China #Seúl #Hangzhou #AirbusA321 #IncendioEnVuelo #BateríasDeLitio #CubaHerald
