El expresidente iraní Hasán Rohani ha declarado su apoyo al candidato reformista Masud Pezeshkian en las próximas elecciones presidenciales de Irán, programadas para este viernes. Según reporta Europa Press, este respaldo llega en un momento crítico, tras el fallecimiento del presidente Ebrahim Raisi en un accidente de helicóptero en mayo.
«Hemos de votar el viernes a alguien decidido a retirar la sombra de las sanciones que pesa sobre el pueblo iraní», expresó Rohani, quien lideró el país entre 2013 y 2021 antes de ser reemplazado por Raisi. Rohani destacó que Pezeshkian, quien es el único candidato reformista entre seis aspirantes, posee cualidades esenciales como «la honestidad, la valentía y la lealtad a los intereses nacionales».
Durante el último día de campaña, Rohani hizo un llamado a los votantes a través de un vídeo que fue enviado al diario ‘Sharg’, enfatizando la importancia de las elecciones para el futuro de Irán. «Las elecciones pueden ser un día muy importante para el país», señaló, añadiendo que la población ha enfrentado «tres años de continuo sufrimiento e inflación por encima del 40 por ciento, presión social en las calles y la espera del fin de las sanciones».
Rohani también criticó a los otros candidatos por no ser completamente honestos durante los debates televisados. «Si uno no tiene el valor necesario, no puede perseguir los objetivos e intereses nacionales», afirmó. Hizo hincapié en la necesidad de elegir a alguien que «ignore los intereses personales y familiares para lograr los intereses nacionales».
El expresidente concluyó su mensaje instando a los votantes a elegir a Pezeshkian si desean «unas interacciones constructivas con el mundo» y una «moderación en el país», esperando que el candidato reformista pueda avanzar a una segunda vuelta electoral frente a los candidatos conservadores.
Este respaldo se produce un día después de que el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, instara a la máxima participación en las elecciones y lanzara críticas veladas que parecían dirigidas a Pezeshkian, especialmente después de sus comentarios sobre la represión de las protestas y su apoyo a reanudar el acuerdo nuclear de 2015.
