La influencer cubana conocida como Flor de Cuba ha dado un paso más en su carrera al adquirir una propiedad en el centro de Holguín, que, según ha anunciado, se convertirá en el espacio de su nuevo negocio. En un reciente video en Instagram, la creadora de contenido compartió con sus seguidores la emoción de este logro personal y profesional, declarando con orgullo: “No es una finca, pero ya tengo mi propia esquina. Y lo mejor, en el centro de Holguín”.
El anuncio fue bien recibido por sus seguidores, quienes han visto en este logro una muestra de su capacidad para trascender como influencer y empresaria. Flor de Cuba, que ha sido una figura destacada en redes sociales por su postura en defensa de sus raíces cubanas, aseguró en su mensaje que este proyecto tiene un significado profundo para ella, al simbolizar no solo una nueva etapa en su vida, sino también una visión de futuro: “Una esquina que puedo ver desde el balcón de mi casa, donde comienzan mis sueños y no van a terminar hasta la cima del cielo”.
En su publicación, Flor de Cuba se dirigió a los jóvenes, especialmente a quienes como ella han alcanzado éxito en las plataformas digitales, instándolos a pensar en su estabilidad a largo plazo. «Algo que siempre he criticado de las personas que tienen éxito o fama en su juventud es que no lo aprovechan para labrar su futuro. Por eso estoy aprovechando cada oportunidad para asegurarme en mi vejez”, afirmó la influencer, quien ve en este nuevo negocio una forma de consolidar su estabilidad financiera y proyectarse a una vejez segura en la isla.
Aunque aún no ha revelado detalles específicos sobre el tipo de negocio que piensa desarrollar en esta esquina de Holguín, sus seguidores especulan con entusiasmo y muestran su apoyo en los comentarios. Esta nueva adquisición también ha sido interpretada como una respuesta a sus detractores en el exilio, quienes la han criticado desde Miami por su perspectiva de la vida en Cuba y su cercanía con la realidad de la isla. Con su declaración, “ya tengo mi propia esquina”, parece subrayar su derecho a construir una vida exitosa en Cuba, al margen de los cuestionamientos externos.
Este nuevo proyecto no solo representa para Flor de Cuba un desafío empresarial, sino también una reafirmación de su amor por su tierra natal. A diferencia de muchos influencers que deciden establecerse fuera del país, ella ha optado por invertir en la isla, mostrando que su compromiso con Cuba va más allá de las redes sociales. Su decisión de construir su futuro en Holguín, su ciudad natal, es vista como un acto de resistencia y pertenencia que, para muchos de sus seguidores en la isla, es inspirador.
La publicación de Flor de Cuba ha desatado una ola de comentarios positivos, donde sus seguidores celebran su tenacidad y visión. En un entorno en el que muchos jóvenes cubanos optan por buscar oportunidades en el extranjero, Flor de Cuba da un mensaje distinto: el de construir un legado en su tierra, invirtiendo en su comunidad y apostando por un crecimiento personal y profesional en la isla.