El rey Felipe VI preside en San Javier el Festival Aire 25, que marca el final de una etapa para el emblema acrobático del cielo español. El Ejército del Aire anuncia su sucesora: la Formación Mirlo
La Patrulla Águila, referente de la acrobacia aérea española y símbolo del Ejército del Aire y del Espacio durante las últimas cuatro décadas, se ha despedido este domingo con una última exhibición sobre el Mar Menor, en el marco del Festival Aire 25, celebrado en la base aérea de San Javier (Murcia). El evento, presidido por el rey Felipe VI, ha reunido a miles de ciudadanos que acudieron a presenciar el último vuelo de los históricos aviones C-101, popularmente conocidos como culopollo.
La Patrulla Águila cerró su trayectoria dibujando por última vez en el cielo los colores de la bandera de España, en una coreografía cargada de simbolismo y emoción. «No se apaga un símbolo, se cierra una etapa que ya forma parte de la historia del Ejército del Aire», afirmó la institución en un mensaje institucional.
Durante el acto, el monarca estuvo acompañado por la ministra de Defensa, Margarita Robles, así como por autoridades regionales como Fernando López-Miras, presidente de la Región de Murcia, e Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid. La jornada incluyó también un acto en homenaje a los miembros de la Patrulla fallecidos en servicio y la inauguración de un monumento en la base, con forma de cola de avión, dedicado a su legado.
En paralelo a la exhibición principal, el público pudo disfrutar de maniobras de otras patrullas internacionales como Patrouille Suisse, Red Arrows y Frecce Tricolori, que también rindieron tributo al equipo español. Entre los aparatos que participaron se destacaron también Eurofighter, F-18, Saeta y helicópteros de la Patrulla Aspa, esta última encargada este año de sobrevolar el desfile del Día de la Hispanidad.
La despedida de los C-101 marca el fin de un ciclo que comenzó el 4 de junio de 1985, fecha del primer vuelo oficial de la Patrulla Águila. Desde entonces, ha realizado más de 500 exhibiciones, de las cuales más de 170 fueron en el extranjero, con un total de más de 20.000 misiones. La unidad ha sido reconocida por su precisión, destreza técnica y su valor simbólico dentro y fuera de España.
El jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, general Francisco Braco, confirmó que la retirada de los C-101 no significa el final de las patrullas acrobáticas. En ese sentido, anunció la creación de una nueva unidad, la Formación Mirlo, que utilizará aviones Pilatus PC-21, el mismo modelo con el que se entrenará la princesa Leonor en la Academia General del Aire a partir de septiembre.
Por ahora, la Formación Mirlo comenzará sus presentaciones usando humo blanco, pero ya se están desarrollando sistemas para incorporar los colores nacionales en sus exhibiciones futuras. Según explicó Braco, “los aviones caducan por mucho que se intenten mantener en vuelo. El tiempo es inexorable”.
Con este cambio generacional, el Ejército del Aire mantiene su compromiso de continuar con las exhibiciones en actos oficiales, como el 12 de octubre o el Día de las Fuerzas Armadas, preservando una de las tradiciones más arraigadas en la cultura visual y simbólica del país.
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