Miramar, FL – Yoselianys Rodríguez, una mujer cubana, fue arrestada después de asistir a su cita con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Miramar, Florida. Ahora se enfrenta a la deportación a Cuba, una situación que ha dejado a su esposo, Ashley Cepero, un ciudadano estadounidense, en una profunda incertidumbre y desesperación.
Rodríguez ingresó a los Estados Unidos cruzando la frontera y recibió el formulario I-220B. Posteriormente, se casó con Cepero, un médico que abandonó una misión en Venezuela y ahora es ciudadano estadounidense. «Cuando ella llega, la dejan detenida. Y la dejan aquí en Broward, que es donde estamos», explicó Cepero. «Ella fue a los juicios. No la defendieron y no la prepararon apropiadamente. Ella no supo qué hacer y, como los cubanos tenemos desgraciadamente la barrera del idioma, eso fue imposible.»
La pareja lleva junta tres años y se casaron hace año y medio, momento desde el cual comenzaron el proceso de petición familiar para regularizar el estatus migratorio de Rodríguez. Sin embargo, su arresto y posible deportación han puesto en peligro su futuro juntos.
La comunidad legal local ha expresado su preocupación por el aumento de deportaciones de ciudadanos cubanos sin antecedentes criminales. Antonio Ramos, un abogado de inmigración, comentó sobre la situación: «Es muy extraño porque existen personas con crímenes que no son deportadas a Cuba. Y las personas que son honestas y que no han cometido ningún delito son deportadas solo porque Cuba los está aceptando.»
Este caso no es un incidente aislado. Recientemente, Mirielzi Cabrera, madre de otro cubano en una situación similar, relató cómo su hijo, también con el formulario I-220B, enfrenta la posibilidad de deportación a pesar de no haber cometido ningún delito. «Desde que entró a este país, lo único que hizo fue trabajar», afirmó Cabrera.
Desde el exterior del Centro de Detención de Broward, Ashley Cepero busca respuestas y aboga por que no se separe a su familia debido a esta incierta y angustiante situación. La comunidad cubana en el área ha mostrado su apoyo y preocupación ante lo que consideran una injusticia hacia individuos que buscan un futuro mejor en Estados Unidos sin haber infringido la ley.
La situación de Yoselianys Rodríguez pone de manifiesto las dificultades que enfrentan muchos inmigrantes cubanos en Estados Unidos, quienes, a pesar de no tener antecedentes criminales, son deportados debido a políticas migratorias estrictas y la cooperación del gobierno cubano en aceptar deportados.
El futuro de Rodríguez y su esposo sigue siendo incierto. La pareja espera que la atención mediática y el apoyo de la comunidad puedan ayudar a revertir la decisión de deportación, permitiéndoles continuar su vida juntos en Estados Unidos. La situación de Rodríguez resalta la necesidad de una revisión exhaustiva y justa de los casos de deportación, especialmente para aquellos sin historial criminal que buscan construir una vida honesta y productiva en su nuevo país.