La Policía Nacional detuvo el pasado 26 de junio, en el aeropuerto de Santiago de Compostela (A Coruña), a Gerelys Sánchez-Reyes, una mujer de 28 años y de origen dominicano, que se encontraba en busca y captura internacionalpor parte de la justicia de Estados Unidos. La detención se produjo a pie de pista, justo cuando la sospechosa se disponía a embarcar en un vuelo con destino a Francia, en lo que habría sido un nuevo intento de huida.
Sánchez-Reyes está acusada del asesinato de Yuleisy Torrelles Martínez, una bailarina venezolana de 21 años con quien compartía apartamento en Filadelfia, Pensilvania. Según los investigadores, la víctima fue acuchillada y su cuerpo fue hallado el 5 de abril oculto en el sofá cama de la vivienda que ambas compartían.
No está claro cuándo llegó la detenida a España, pero se sospecha que pudo haberse ocultado en territorio español poco después del crimen. La rápida actuación de los cuerpos de seguridad permitió ubicarla y capturarla antes de que abandonara el país.
En el momento de su detención, no portaba armas ni ofreció resistencia. Actualmente se encuentra en prisión preventiva y se espera su extradición a Estados Unidos, donde enfrentará cargos por asesinato en primer grado ante las autoridades del estado de Pensilvania.
El caso ha generado un amplio interés mediático tanto en España como en Estados Unidos, y pone de relieve la importancia de la cooperación internacional en la persecución de crímenes graves y la vigilancia en puntos estratégicos como los aeropuertos.
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