La noche en Pueblo Nuevo, Matanzas, se vio alterada por el estruendo del colapso de parte de un edificio abandonado, suceso provocado por las fuertes lluvias que azotaron la región. El incidente tuvo lugar en la esquina de la Calle San Juan de Dios con San Diego, dentro del barrio, donde la fachada de una antigua fundición, desocupada por años debido a fallos estructurales, se derrumbó, dejando escombros esparcidos por la calle.
«Sobre las 10 de la noche sentí el estruendo», comentó Mayelín Fernández, presidenta del CDR 17 de Pueblo Nuevo, quien reside junto al inmueble afectado, a Periódico Girón. Este evento no fue completamente inesperado para los habitantes locales, quienes previamente habían expresado preocupaciones sobre la estabilidad del edificio.
La preocupación de la comunidad es palpable, temiendo que el resto del edificio pueda colapsar en cualquier momento, lo que representaría un riesgo significativo para los transeúntes y residentes cercanos. Las advertencias sobre el peligro potencial del edificio, manifestadas anteriormente por los vecinos, subrayan la necesidad de atención y medidas preventivas para estructuras en condiciones similares.