El fallecimiento de un niño en la comunidad montañosa de El Cuero, en el municipio de Imías, ha generado debate luego de que sus familiares y vecinos decidieran trasladar el féretro a pie, suspendido de una hamaca con un palo, hasta el lugar de su entierro. El hecho ha suscitado diversas reacciones en la población, con opiniones encontradas sobre las circunstancias que llevaron a esta situación.
Algunos residentes han señalado que la falta de transporte en la zona obligó a la familia a improvisar este método para trasladar el cuerpo del menor, destacando las dificultades de acceso y las limitaciones logísticas en áreas rurales. En redes sociales, varias personas han expresado indignación, argumentando que este hecho refleja deficiencias en la infraestructura y en la capacidad de respuesta de las autoridades locales ante situaciones sensibles.
Por otro lado, el Departamento de Servicios Necrológicos de Imías ha asegurado que se habían realizado las coordinaciones necesarias para garantizar el traslado del féretro a través de los mecanismos oficiales. Según Yaima Delgado, jefa del departamento, estaba previsto un servicio alternativo para facilitar el proceso, pero la familia decidió llevar a cabo el traslado por sus propios medios.
Ante lo ocurrido, el Consejo de la Administración Municipal ha indicado que se investigarán las circunstancias que llevaron a esta decisión y se evaluará la eficiencia de los servicios disponibles en estas comunidades de difícil acceso. Mientras tanto, el hecho continúa generando cuestionamientos sobre las condiciones del transporte y la asistencia en zonas rurales, así como sobre la capacidad de respuesta de las instituciones en momentos de duelo.
