Este 11 de julio, Cuba conmemora el tercer aniversario de las protestas del 11J, una jornada histórica donde miles de ciudadanos demandaron cambios profundos en la isla. Las autoridades han incrementado la vigilancia en los barrios, desplegando brigadas de respuesta rápida y la Policía (PNR), coordinados por el Partido Comunista de Cuba (PCC), para prevenir cualquier intento de protesta.
El 11J de 2021 marcó un punto de inflexión cuando los cubanos, enfrentados a una grave crisis económica y restricciones en libertades, se unieron en protestas que iniciaron en San Antonio de los Baños y se extendieron a nivel nacional. La respuesta gubernamental fue inmediata y severa, incluyendo arrestos arbitrarios y cortes de internet, destacando un patrón de represión que ha sido documentado por organizaciones internacionales como Amnesty International y medios de comunicación como Univision.
Este aniversario se observa bajo una atmósfera de tensión y vigilancia. Los reportes de cortes de internet han resurgido, según indican fuentes locales y medios como Voz de América, en un esfuerzo por limitar la comunicación y la organización de los ciudadanos. La visible presencia de las fuerzas de seguridad en las calles refleja la preocupante anticipación de las autoridades ante posibles manifestaciones.
Mientras las autoridades buscan mantener el orden, la memoria de las protestas del 11J sigue siendo una fuente de inspiración para muchos en Cuba. Activistas y organizaciones de derechos humanos siguen luchando por la liberación de quienes fueron detenidos en las manifestaciones y aquellos que aún permanecen encarcelados. Estos esfuerzos subrayan una lucha continua por los derechos fundamentales en la isla, un lema que, pese a la represión, sigue resonando entre los cubanos.
