La Empresa Aguas de La Habana ha informado a través de su cuenta oficial en Facebook sobre una avería significativa en el sistema eléctrico de Cuenca Sur, que ha dejado a cuatro pozos operando por debajo de sus valores normales. Esta situación ha provocado una grave afectación al suministro de agua en varios municipios de La Habana, incluyendo Boyeros, Cerro, Plaza de la Revolución y Diez de Octubre, según reporta Europa Press.
La empresa ha detallado que la avería se debe a una cruceta suelta en la línea Pedro Díaz, lo que ha afectado tanto las presiones como los caudales de trabajo necesarios para mantener un servicio de agua adecuado. En estos momentos, técnicos de la Empresa Eléctrica están trabajando intensamente en el lugar para solucionar el problema y restablecer el suministro normal.
Esta interrupción en el servicio de agua se suma a una serie de desafíos que la población cubana ha estado enfrentando en las últimas semanas. Además de la crisis sanitaria causada por el virus del Oropuche, que se ha visto exacerbada por la acumulación de basura en las calles, la falta de agua complica aún más la situación higiénica y sanitaria de los ciudadanos.
En diversas partes de Cuba, la escasez de agua ha sido un problema recurrente, afectando tanto a zonas urbanas como rurales. La infraestructura envejecida, junto con problemas técnicos y económicos, ha dificultado la capacidad de las autoridades para mantener un suministro constante y seguro de agua potable.
Los residentes de los municipios afectados en La Habana han expresado su frustración y preocupación, señalando que la falta de agua afecta no solo las actividades diarias básicas, sino también las medidas de prevención sanitaria en medio de la propagación de enfermedades transmitidas por mosquitos, como el virus del Oropuche.
Es preocupante que, a pesar de las reiteradas promesas de mejorar los servicios públicos, el gobierno cubano no haya logrado implementar soluciones eficaces y sostenibles para evitar estas crisis recurrentes. La situación actual destaca una vez más las deficiencias en la gestión de recursos esenciales y la necesidad urgente de una revisión y mejora integral del sistema de suministro de agua en la isla.
Mientras tanto, las autoridades locales han instado a la población a racionalizar el uso del agua y adoptar medidas preventivas adicionales para minimizar los riesgos sanitarios. La comunidad internacional también ha sido llamada a ofrecer su apoyo para ayudar a Cuba a enfrentar estos desafíos críticos.
En resumen, la combinación de problemas técnicos en el suministro de agua y la crisis sanitaria actual en Cuba subraya la vulnerabilidad de las infraestructuras esenciales del país y la urgencia de implementar soluciones sostenibles y de largo plazo. La incapacidad del gobierno para resolver estos problemas de manera eficiente plantea serias dudas sobre su capacidad para gestionar los recursos y garantizar el bienestar de su población.