La comunidad de Picadora, en la ciudad de Villa Clara, ha sido estremecida por un horrendo asesinato que se suma a la creciente ola de violencia en Cuba. Erisbel Martínez, un joven de 33 años, fue trágicamente asesinado en su propia casa, en un acto que ha dejado a la localidad en estado de shock y dolor.
El incidente ocurrió cuando Yenitey Marrero Nodal, perseguida por un asesino, buscó refugio en la vivienda de Martínez durante la noche. Según los informes, una violenta confrontación tuvo lugar en el hogar del joven. Al día siguiente, el padre de Martínez, preocupado por la ausencia de su hijo que acostumbraba visitarlo todas las mañanas, acudió a su casa. Allí descubrió manchas de sangre en las sábanas y salpicaduras por todo el lugar, un escenario que presagiaba la tragedia.
Ante la falta de noticias de su hijo, el hermano de Martínez acudió a la policía para reportar la situación, pero su denuncia fue inicialmente desestimada ya que las autoridades requerían que transcurrieran 72 horas para considerarla una desaparición. Determinado a encontrar respuestas, el hermano confrontó a Marrero Nodal, quien finalmente lo llevó al lugar donde estaba el cuerpo de Erisbel. Allí encontraron al joven atado con piedras por la cintura y en avanzado estado de descomposición, junto con su billetera y su carnet de identidad.
Marrero Nodal reveló que ella y el asesino, identificado como Eduardo Miñoso —un delincuente que actualmente está prófugo—, habían arrojado el cuerpo de Martínez a la presa. La policía desplegó buzos que recuperaron el cuerpo, confirmado las circunstancias macabras de su muerte.
Este brutal asesinato no solo ha provocado una profunda conmoción y tristeza en la comunidad, sino que también ha intensificado el clamor por justicia y una revisión crítica de la respuesta policial ante incidentes de violencia. La familia de Erisbel Martínez, junto con amigos y vecinos, exigen respuestas y medidas para asegurar que tales actos de violencia no queden impunes. Este caso subraya la necesidad urgente de fortalecer las estrategias de seguridad y las leyes para proteger a los ciudadanos y prevenir la escalada de violencia en la región.
