El Gobierno de Colombia ha expresado su frustración ante la falta de avances en los diálogos de paz con Luciano Marín Arango, alias ‘Iván Márquez’, líder de la Segunda Marquetalia. Según reporta Europa Press, el jefe negociador del Ejecutivo, Armando Novoa, ha manifestado que la ausencia de señales claras de vida del líder guerrillero está obstaculizando el proceso. “Pareciera que tratamos con un fantasma”, afirmó Novoa en declaraciones recientes.
El funcionario destacó que cualquier progreso en la mesa de diálogo depende de la confirmación de la existencia real del interlocutor. Las dudas sobre la situación de ‘Márquez’ se incrementaron hace un mes, tras someterse a una operación por heridas sufridas en un atentado. Desde entonces, su comunicación ha sido limitada y exclusivamente a través de cartas. En su última misiva, desautorizó al jefe negociador de la guerrilla, José Vicente Lesmes, alias ‘Walter Mendoza’.
“Un diálogo de paz no puede avanzar a través de medios puramente epistolares”, señaló Novoa en entrevista con Blu Radio. También expresó la disposición del Gobierno para reunirse con ‘Márquez’ en cualquier lugar y momento, pero insistió en la urgencia de obtener una respuesta tangible.
Urgencia en las negociaciones
Novoa subrayó que las comunidades afectadas por la presencia de grupos armados ilegales en los territorios viven una situación “muy grave”, lo que exige una mayor rapidez en las negociaciones. “Necesitamos una señal de supervivencia para poder reiniciar un diálogo útil que nos permita encontrar un acuerdo de paz antes de que termine el presente Gobierno”, enfatizó.
El proceso de paz también enfrenta desafíos internos dentro de la Segunda Marquetalia. ‘Márquez’ habría desautorizado a dos de las estructuras del grupo y cuestionado el papel de ‘Mendoza’ en el proceso, según reveló el Gobierno durante una reunión en Puerto Asís, Putumayo. Sin embargo, la delegación guerrillera ha puesto en duda la autoría de la carta y ha solicitado al Gobierno que verifique su autenticidad.
La falta de claridad sobre la situación de ‘Iván Márquez’ ha generado tensiones en el proceso, que ahora depende de obtener pruebas de vida para garantizar su continuidad. Mientras tanto, el Gobierno reafirma su compromiso de buscar una paz efectiva que se materialice en los territorios afectados por la violencia.