Una nueva tienda que opera exclusivamente en dólares estadounidenses abrió recientemente sus puertas en Miramar, La Habana, consolidando la presencia de comercios en moneda extranjera dentro del panorama económico cubano. Ubicada en la intersección de 3ra y 70, esta tienda se suma a la estrategia del gobierno para captar divisas y fortalecer la economía, en un contexto de creciente escasez de liquidez.
El establecimiento acepta pagos únicamente en dólares, ya sea en efectivo o mediante tarjetas asociadas a cuentas en divisas extranjeras, lo que limita el acceso de quienes no disponen de esta moneda.
Un modelo de negocio enfocado en la captación de divisas
La proliferación de tiendas que operan con monedas extranjeras responde a la necesidad del gobierno cubano de recaudar dólares y otras divisas en medio de una crisis económica prolongada. Estos establecimientos han sido diseñados para atraer clientes con acceso a remesas o ingresos vinculados al turismo, dejando fuera a una parte significativa de la población que depende exclusivamente del salario en pesos cubanos.
El impacto de este modelo ha generado debate entre los cubanos, quienes ven en estas tiendas una alternativa para adquirir productos que escasean en el comercio convencional, pero también una evidencia de la creciente segmentación del acceso a bienes en la isla.
Un sistema con particularidades: el vuelto en caramelos
Uno de los aspectos que más ha llamado la atención de los clientes es la falta de billetes de baja denominación en dólares, lo que ha llevado a los empleados a entregar el cambio en caramelos o productos de pequeño valor. Esta práctica, que ya se ha observado en otros comercios que operan en moneda extranjera, evidencia las dificultades logísticas de un sistema que aún enfrenta desafíos para funcionar con normalidad.
Diferencias con las tiendas en MLC
A poca distancia de este nuevo comercio se encuentra un mercado en Moneda Libremente Convertible (MLC), una modalidad de tienda que también se enfoca en captar divisas, pero con una diferencia clave: las compras solo pueden realizarse con tarjetas bancarias asociadas a cuentas en divisas.
La principal distinción entre ambos modelos radica en que, mientras las tiendas en MLC requieren el uso de tarjetas electrónicas, la nueva tienda en Miramar permite pagos en efectivo en dólares, ofreciendo una opción adicional para quienes prefieren utilizar billetes en vez de cuentas bancarias.
Un reflejo de la transformación económica en Cuba
La apertura de este tipo de establecimientos forma parte de la estrategia del gobierno cubano para paliar la crisis económica y garantizar el acceso a productos importados para quienes disponen de moneda extranjera. Sin embargo, también refuerza la brecha entre quienes pueden acceder a estos comercios y quienes dependen del peso cubano, cuyo poder adquisitivo sigue en descenso.
Con la proliferación de tiendas en dólares y en MLC, la economía cubana continúa transitando por un modelo cada vez más segmentado, donde el acceso a bienes y servicios está determinado por la capacidad de disponer de divisas extranjeras.