Varios barrios de Camagüey han sido fumigados en los últimos días como parte de las acciones de control sanitario, pero la situación epidemiológica sigue empeorando según testimonios de residentes. A pesar de las intervenciones, numerosos vecinos aseguran que los casos de fiebre, malestar general y otros síntomas asociados al “famoso virus” continúan extendiéndose dentro de las comunidades.
Familias consultadas por CubaHerald, describen un escenario de creciente preocupación. Algunos reportan que todos los miembros de sus hogares han enfermado, mientras otros refieren que los cuerpos de guardia están colapsados, con largas esperas y capacidad limitada para atender la afluencia de pacientes.
En varios repartos, vecinos han manifestado que la fumigación llega tarde y no va acompañada de otras medidas esenciales, como suministro estable de agua o recogida de desechos, factores que facilitan la proliferación de vectores. También señalan la falta de personal suficiente y la escasez de recursos en policlínicos y hospitales, que dificulta el diagnóstico oportuno y la atención adecuada.
Aunque no existe un parte oficial reciente que detalle la magnitud del brote, la percepción en la población es de incremento sostenido de casos y de una respuesta institucional que no logra contener la propagación. Especialistas consultados advierten que la combinación de temperaturas elevadas, deficiencias estructurales y circulación viral favorece que la situación se mantenga crítica mientras no se adopten medidas integrales.
La población, por su parte, pide mayor claridad, recursos y acciones efectivas ante una crisis sanitaria que continúa afectando a miles de familias camagüeyanas.
#Camagüey #SaludPública #Fumigación #Cuba #Epidemia
