Anchorage, Alaska – Los presidentes Donald Trump y Vladimir Putin sostienen este viernes un encuentro histórico en la ciudad de Anchorage, con la guerra en Ucrania como telón de fondo y un clima internacional marcado por la desconfianza mutua.
La cita, programada para las 11:30 a.m. hora local (3:30 p.m. ET), llega en un momento en que Washington y Moscú buscan, al menos públicamente, explorar vías para reducir la tensión. Trump ha asegurado que ve opciones para alcanzar un acuerdo que ponga fin al conflicto, aunque reconoció que las probabilidades de éxito son limitadas. En contraste, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, no fue invitado a la reunión inicial, lo que ha despertado críticas y preocupación en Kiev.
Perspectivas encontradas
Mientras Trump ha advertido a Rusia sobre “consecuencias muy severas” si no se logran avances, Putin ha elogiado el enfoque de la administración estadounidense y ha dejado entrever que podría haber espacio para discutir también un pacto de control de armas nucleares. Sin embargo, cualquier entendimiento sobre Ucrania pasaría por un delicado punto: la definición territorial, dado que Rusia mantiene bajo control casi una quinta parte del país.
Movimientos previos a la cumbre
Putin llegó a Alaska tras una escala en la región rusa de Magadán, donde participó en reuniones con autoridades locales y visitó una planta industrial. Por su parte, Trump viajó directamente desde Washington a bordo del Air Force One.
La delegación rusa, encabezada por el ministro de Exteriores Sergey Lavrov, no pasó inadvertida: el diplomático fue fotografiado en Anchorage vistiendo un suéter con las siglas “CCCP”, evocando la antigua Unión Soviética, un gesto interpretado por analistas como un mensaje simbólico sobre el peso que Moscú busca recuperar en el tablero mundial.
Reacción de Ucrania
Desde Kiev, Zelensky calificó la reunión como “de alto riesgo” y reiteró que su objetivo sigue siendo una paz justabasada en la retirada rusa. Aseguró que Ucrania está preparada para un formato trilateral que incluya a Estados Unidos y a Rusia, con participación europea, y advirtió que sus fuerzas continúan enfrentando ofensivas rusas en el este del país.
Análisis internacional
Expertos consultados señalan que, más allá de las declaraciones, Trump podría utilizar la cumbre como plataforma para replantear las relaciones con Moscú, buscando un equilibrio entre presionar por el fin de la guerra y abrir la puerta a un acercamiento político y económico.
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