WASHINGTON — Un análisis preliminar de la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) sugiere que los ataques militares realizados por Estados Unidos contra tres instalaciones nucleares en Irán no lograron destruir los componentes centrales del programa nuclear iraní, contrariamente a lo que ha declarado el presidente Donald Trump.
De acuerdo con un reportaje exclusivo publicado por CNN, que cita a cuatro fuentes con conocimiento directo del análisis, las operaciones del pasado fin de semana solo habrían retrasado el programa nuclear iraní por unos pocos meses, sin causar daños significativos a las centrifugadoras ni a las reservas de uranio enriquecido.
El informe de daños fue elaborado tras una evaluación en el terreno por parte del Comando Central de EE.UU. y contradice las afirmaciones tanto de Trump como del secretario de Defensa, Pete Hegseth, quienes aseguraron que el programa nuclear de Irán había sido completamente “destruido”.
Una de las fuentes citadas por CNN sostuvo que las centrifugadoras permanecen casi intactas, mientras que otra indicó que los ataques se concentraron mayoritariamente en infraestructura superficial, como el suministro energético y áreas utilizadas para la conversión de uranio.
Reacciones desde la Casa Blanca
La vocera presidencial, Karoline Leavitt, rechazó categóricamente los hallazgos filtrados a CNN, calificándolos de “erróneos” y acusando a un supuesto “miembro de bajo nivel de los servicios de inteligencia” de intentar desacreditar al presidente y a los pilotos que ejecutaron la operación.
“Sabemos lo que ocurre cuando se lanzan catorce bombas de 13.600 kilos sobre un objetivo: una aniquilación total”, dijo Leavitt.
El presidente Trump, por su parte, reafirmó este martes su convicción de que las instalaciones fueron completamente destruidas, y elogió la precisión de los bombardeos, realizados por bombarderos B-2 en los complejos nucleares de Fordow y Natanz, y con misiles Tomahawk lanzados desde un submarino en el caso de Isfahán.
No obstante, el jefe del Estado Mayor Conjunto, Dan Caine, adoptó una postura más cautelosa, señalando que la evaluación sigue en curso y que es “demasiado pronto para saber” si Irán aún conserva capacidad nuclear.
Instalaciones bajo tierra y capacidades no reveladas
Según CNN, existe un escepticismo persistente entre analistas y expertos en defensa sobre la eficacia de las bombas antibúnker de EE.UU. contra instalaciones enterradas a gran profundidad, como las de Fordow e Isfahán. De hecho, Isfahán fue atacada con misiles, no con bombas penetrantes, porque se consideró que estas no lograrían alcanzar los niveles inferiores del complejo.
Adicionalmente, fuentes de inteligencia estadounidenses citadas en el informe aseguran que Irán mantendría instalaciones nucleares secretas, no incluidas en los bombardeos, que seguirían operativas.
Incertidumbre política
CNN también reportó que fueron pospuestas sin explicación las sesiones informativas clasificadas sobre la operación militar, que estaban previstas para el Senado y la Cámara de Representantes. Legisladores como el representante Pat Ryan (D-NY) cuestionaron la cancelación, acusando a Trump de evitar el escrutinio por haber exagerado el impacto realde los ataques.
“Su equipo sabe que no puede respaldar sus bravuconadas”, escribió Ryan en la red social X.
Las conclusiones de este análisis preliminar ponen en duda la narrativa oficial de la Casa Blanca, en un momento de alta tensión geopolítica tras el reciente alto al fuego entre Irán e Israel.
📌 Fuente: CNN, reportaje de Natasha Bertrand, Katie Bo Lillis y Zachary Cohen
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