En el marco de la XXXIII Feria Internacional del Libro de La Habana, el escritor, crítico literario y poeta Virgilio López Lemus se erige como uno de los grandes homenajeados de esta edición, un reconocimiento que refleja su extensa contribución a la cultura literaria cubana. Con una carrera que abarca poesía, ensayo, crítica literaria y traducción, López Lemus no solo se ha consolidado como un referente intelectual, sino también como un incansable defensor de la literatura como un acto de servicio y compromiso con la humanidad.
El compromiso de un crítico literario
En una entrevista exclusiva, López Lemus reflexionó sobre su legado y el valor de la crítica literaria. «La crítica orienta, ilumina, hace ver los valores y los fallos, alza o rebaja según lo que merezca. Es una herramienta necesaria para formar lectores y fomentar una salud literaria en cualquier sociedad», compartió el escritor, subrayando la importancia de un análisis profundo y sin prejuicios. A lo largo de su carrera, López Lemus ha defendido una crítica que no sea superficial ni malintencionada, sino que se enfoque en descubrir lo esencial de cada obra.
Cuando se le preguntó sobre la crítica literaria en Cuba, López Lemus no dudó en aclarar que, lejos de escasear, el país ha contado con figuras críticas de renombre desde el siglo XIX, como Mañach y Marinello, y continúa cultivando un ejercicio literario enriquecedor y plural. «La crítica cubana ha estado siempre viva y en constante evolución, a pesar de la falta de algunas reseñas debido a la gran producción literaria», afirmó.
La poesía como un misterio que trasciende la definición
A lo largo de la entrevista, López Lemus dejó claro que su visión sobre la poesía es profunda y casi mística. «La poesía no puede definirse», señaló con humildad, «como tampoco se puede definir la vida o la inteligencia humana». Para él, la poesía es algo más que un género literario: es una forma de captar el universo y la esencia misma del ser humano. «Todo el mundo puede apreciar la poesía que subyace en la vida, en la naturaleza, en el cosmos», explicó, invitando a los lectores a descubrir las maravillas ocultas que ofrece el arte de la palabra.
A los jóvenes escritores y lectores que aún no comprenden el valor de la poesía, López Lemus les recomienda acercarse a ella con apertura y disposición. «La poesía requiere cierta predisposición natural, un amor por la escritura y por las sorpresas que ofrece. Si no se aprecia, es porque aún no se ha experimentado en su profundidad».
La labor de un servidor de la literatura
A lo largo de su carrera, López Lemus ha publicado más de una decena de libros de ensayo y compilaciones, además de una serie de poemarios que le han valido un lugar destacado en la literatura cubana. Sin embargo, a pesar de los reconocimientos y los logros acumulados, el escritor sigue viéndose a sí mismo como un «servidor de la poesía» y como alguien cuya misión es hacer que su trabajo sea útil y significativo para las generaciones futuras.
En cuanto al relevo literario, López Lemus es claro: no cree en una sucesión directa entre escritores, ya que cada autor aporta su propia visión y contribución única a la historia literaria. «Cada quien viene a entregar lo suyo, ya sea en la cima de una montaña o en la llanura literaria, pero su legado debe ser valioso y auténtico», afirmó.
Un legado de belleza y honestidad
En sus reflexiones sobre el futuro, López Lemus expresó su deseo de dejar un legado de belleza y utilidad, anhelando que su trabajo perdure no por su relevancia personal, sino por su capacidad de transformar y enriquecer a los demás. «Por sus obras los conoceréis», afirmó, indicando que el verdadero valor de un autor se mide por la huella que deja en su obra, no por la imagen pública que proyecta.
Con proyectos aún en desarrollo, como varios libros inéditos, López Lemus continúa trabajando incansablemente, con la esperanza de que sus escritos no solo sean reconocidos, sino también comprendidos y apreciados por generaciones venideras. «Mi misión de vida es lograr la utilidad de la belleza, del bien y de la escritura constante», concluyó, con la certeza de que su labor literaria, aunque incompleta, sigue en marcha y ofrece un camino hacia el entendimiento profundo de la humanidad.
A lo largo de esta entrevista, Virgilio López Lemus se mostró como un hombre de profunda humildad y honestidad, comprometido no solo con la literatura, sino con el futuro de la cultura cubana y universal.